
¿Qué es eso de "Pilates"?
02.08.16
¿Qué es eso de Pilates?
“Estoy fatal de la espalda, a ver si me pongo a hacer algo que esto no puede seguir así”, “El médico me ha recomendado hacer algún ejercicio para mis problemas de espalda”, “Quiero hacer ejercicio. Me han dicho que (insertar aquí el deporte de moda en ese momento) va fenomenal”
¿Te suena? ¿Te sientes identificado?
Por que a nosotros si nos suena. Son frases muy comunes que escuchamos día a día en nuestra consulta o a personas con las que charlamos en cualquier lugar acerca de “ejercicios buenos” para el cuerpo. Pero, ¿Cuáles son esos buenos ejercicios?.
Para empezar tenemos que decir que cualquier ejercicio que hagamos solo puede aportarnos beneficios siempre y cuando lo realicemos bien y se adapte a nuestras necesidades y características específicas. Cada deporte, o mejor dicho, cada forma de ejercitarse, conlleva una serie de beneficios específicos para nuestro cuerpo y también una serie de potenciales “problemas” en caso de exceso o mala ejecución, pero, si todo fuera bonito sería demasiado aburrido, ¿no?.
Sin embargo, en cuanto a problemas de espalda se refiere, hay tres disciplinas que se llevan la palma: la archiconocida natación, el, también bueno para la mente, yoga, y el famoso Pilates.
Y hablando de Pilates. ¿Qué es exactamente?, ¿es realmente bueno para la espalda?, ¿para el resto del cuerpo?, ¿se trabaja de verdad? Pues bien, vamos a aclarar algunas cosas de esta metodología de ejercicio.
Y es que es así. Pilates es un método. Pilates tiene una serie de principios, ejercicios concretos y formas de realizarlos que buscan unos objetivos específicos.
“Pilates es eso de los estiramientos, ¿no?”
Es lo que mucha gente piensa cuando le preguntas por pilates. El método Pilates es “gimnasia” pura y dura. Las clases son básicamente una sucesión de ejercicios concretos que trabajan diferentes partes del cuerpo y tiene un objetivo concreto. Estos ejercicios se realizan en diferentes posiciones: tumbados boca arriba, sentados, en cuadrupedia, de pie y, en definitiva, en todas las formas posibles.
Personas evidentemente felices practicando el método Pilates.
Hay Pilates máquina, que se hace sobre una cama articulada. En Pilates suelo, trabajamos sobre una colchoneta en el suelo. Aparte hay Pilates aparatos, que son, como su nombre indica, diferentes aparatos donde realizamos otro tipo de ejercicios. Además, en Pilates se utilizan diferentes objetos como pelotas suizas (más conocidas como fitball), aros de resistencia, etc.
Ejercicio de Pilates añadiendo una pelota suiza o "fit ball".
Aunque hay varios principios en Pilates, quizá el más característico y fundamental sea el concepto de “centro” o, como era llamado originalmente, el “power house”. Básicamente es el control y contracción de la musculatura profunda abdominal y del suelo pélvico para estabilizar el “centro” del cuerpo y que de ahí surja el movimiento de los ejercicios. Si tenemos una base estable y controlada los esfuerzos que hagamos no “tirarán” de donde no deben. De este punto surge una característica del método Pilates, y es que muchos ejercicios son de “abdominales”. Y en la mayoría de los que no lo son, vas a tener que trabajarlos también.
La idea de Pilates = estiramiento nace de que los ejercicios utilizan posturas que nos obligan a estirar distintas partes del cuerpo, pero dentro de la ejecución propia del ejercicio en cuestión. Si bien es cierto que algunos tienen como objetivo principal el estiramiento.
Llegados a este punto, debes tener claro que Pilates es bueno para el cuerpo, pero quizá no por qué para la espalda en concreto. Si los músculos que interactúan con tu espalda están más sanos y fuertes, tu espalda estará mejor. Toda la estabilización y el trabajo abdominal crea una faja natural que protege las lumbares cuando realizamos esfuerzos. Los ejercicios que involucran la musculatura de la zona dorsal, los hombros, pecho, y demás, fortalecen y hacen resistentes a esos músculos y eso lo notas en tu día a día. Y todos los estiramientos y la movilización de las articulaciones que se trabaja en una clase de Pilates dan a tu espalda flexibilidad y movilidad. ¿Suena bien, no?
Pero el método Pilates también tiene “peros”.
Hasta que dominamos los ejercicios vamos a, inconscientemente, forzar el cuerpo y notaremos alguna molestia los días posteriores a las primeras clases. Para la gente no muy flexible, intentar realizar los ejercicios lo mejor posible le va a costar y a veces frustrar, pero a eso hemos venido. Es un método, no un juego, y por lo tanto requiere que aprendas, repitas y repitas hasta que vayas consiguiendo los objetivos y notes los resultados, por lo tanto, requiere un poco de dedicación y paciencia. Pero cuando empieces a conocer los ejercicios, a hacerlos mejor, y vayan saliendo a la luz los resultados de tus esfuerzos, no querrás dejarlo, no podrás vivir sin hacer Pilates y pensarás: ¿cómo no he empezado yo antes a hacer esto?.
Ahora eres todo un experto/a en Pilates. ¡Solo falta ponerte a hacerlo!. Si tienes dudas, quieres saber más o, como no, empezar a practicar Pilates, no dudes en contactar con FisioRetiro.
Gracias por tu atención.